Se aconseja a los progenitores acercarse a los hijos y realizar actividades juntos.
Si bien existen varias alternativas para que los niños tengan actividad durante sus vacaciones, esta temporada del año debería ser aprovechada por los padres para acercarse a los pequeños, lograr mejores canales de comunicación y así ganar la confianza del niño para deba afrontar nuevos retos.
“Es una buena oportunidad en la que los padres deben cambiar el diálogo. En clases se exige responsabilidad, en vacaciones debe haber comunicación, los padres y los hijos deben compartir y reflexionar”, explicó el psicopedagogo Marcelo Martínez.
Según Lizeth Canga García, las vacaciones deben verse como un momento ideal para nuevas experiencias familiares, para fortalecer afectos y encuentros. “Los padres pueden descubrir cómo van evolucionando los hijos”, destacó.
A lo anterior se suma, que si bien existen una variedad de actividades, en casa los niños tienen la mismas posibilidad de mantenerse activos y además con creatividad, los padres pueden ayudarles a recordar los números o la lectura, entre otras. Por ejemplo, cuando la mamá va de compras, puede pedirle a uno de los hijos ayuda para sacar las cuentas o con cuánto de cambio puede volver.
En estos meses existe mayor flexibilidad para que los niños se acuesten un poco más tarde, así los padres pueden leerles un cuento antes de dormir. A los más grandes se les puede pedir ayuda para pintar la casa o arreglar los muebles. Estas actividades ayudan a los padres para acercarse a los más pequeños.
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