M ariela contó que siente la rebeldía de sus hijos, tiene una sola consecuencia: el divorcio con su pareja. Aseguró que ahora, que pasan por la etapa de la preadolesencia, es más difícil entablar un diálogo y mantener la relación que tenían antes de este panorama.
Una etapa muy difícil. Un divorcio es una situación que provoca estrés, afirmó el psicólogo, Eduardo Sánchez. “La ausencia de alguno de los padres es como una pérdida para los hijos por la que atraviesan y en un principio lo niegan, pero conforme pasa el tiempo lo terminan aceptando”, dijo el especialista.
Consecuencias. Obviamente existen varias consecuencias después del divorcio, una de ellas es la rebeldía ante la autoridad que quedó en casa, explicó Sánchez. Esta es una forma de demostrar que no esta cómodo con la situación que el joven vive” que también se manifiesta con depresión y ansiedad", afirmó el especialista.
Deben sentirse amados por ambos. Sánchez, puntualizó, que primeramente los padres deben hacer entender a los hijos que si bien ellos dejaron de ser esposos, jamás dejarán de ser sus padres toda la vida. Asimismo, se deben considerar, aunque suene “ilógico”, tomar terapias postdivorcio para poder sobrellevar esta situación y seguir siendo buenos padres.
La clave está en saber hablar y escuchar La psicóloga Isabel Alexander, indicó que no hay una fórmula general, pero que, siempre, de debe hablar y escuchar a los hijos, es decir, consultarles sobre sus sentimientos, pensamientos, porque al saber esto, los progenitores ven más fácil ayudarlos y colaborar. “Más allá de dar un sermón o llamarles la atención es necesario saber escuchar”, dijo.
Evite problemas. Sánchez, también puntualizó que ambos padres deben dejar de un lado las diferencias y evitar discutir en delante de los chicos. A esto Alexander agregó que si el comportamiento de los chicos no cambia, es necesario consultar con un profesional del área de psicología.
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