La fobia consiste en una verdadera angustia que se adueña de las personas que la padecen.
La persona fóbica es totalmente consciente de su miedo. Por eso, intenta evitar la situación o el objeto temido. Sin embargo, tener fobia suele ser molestoso. Obviamente, depende de lo que causa el miedo. Por ejemplo, las personas ofidiofobias, es decir, que temen las serpientes, pueden vivir normalmente, ya que no se encuentran estos reptiles cotidianamente en las ciudades. Por otro lado, la agorafobia o fobia a las multitudes, suele convertirse en una discapacidad para las personas que la padecen. Es lo mismo para los individuos claustrofóbicos, es decir, la gente que teme los espacios cerrados. Estas personas deben enfrentar su miedo irracional a diario, intentando superar su angustia. Sin embargo, la ansiedad que acompaña la fobia puede evolucionar en crisis de pánico, lo que agobia al individuo fóbico tanto física como psicológicamente. Generalmente, a consecuencia de esto, la persona tiende a aislarse progresivamente de las situaciones problemáticas, lo que puede tener repercusiones sobre su vida profesional y social. Por lo tanto, es esencial acudir a un profesional para disminuir la fobia y poder vivir mejor.
5 maneras para reducirlas
PSICOLOGÍA
Las terapias cognitivas y comportamentales son muy eficaces para reducir las fobias. El terapeuta ayuda a la persona fóbica a enfrentar su miedo, exponiéndola progresivamente al objeto o situación temida. Esta exposición se realiza por imagen mental. Gracias a la relajación y el trabajo efectuado sobre los pensamientos y emociones sentidas por el paciente, el psicólogo establece una lista de objetivos que se debe lograr durante las sesiones. Al final, el paciente debe poder enfrentar sus miedos sin ansiedad, gracias a una insensibilización progresiva.
RELAJACIÓN
Existen diversas técnicas para relajarse. El objetivo consiste en reducir las tensiones musculares y mejorar la respiración. En el tratamiento de las fobias, se puede combinar estas técnicas con métodos de visualización. De esta manera, el paciente que está en estado de relajación debe visualizar mentalmente la situación que le provoca ansiedad.
HIPNOSIS
El estado de consciencia obtenido bajo hipnosis se aparenta a un estado profundo de relajación. Es recomendado para poder controlar las fobias. Algunas investigaciones científicas demostraron que la eficacia del tratamiento puede durar hasta 3 años post terapia. Sin embargo, se debe acudir obligatoriamente a un profesional.
CHOQUE
Ciertas personas privilegian los métodos de choque, los cuales consisten en terapias conductuales donde se produce una exposición obligada al estímulo. Se sigue presentando el objeto temido hasta que el individuo fóbico controle su ansiedad.
ACUPUNTURA
Es ideal en casos de estrés, ya que la acupuntura permite analizar los diferentes síntomas que provocan ansiedad, lo que pasa como por ejemplo en las fobias. Además, gracias a las agujas, el profesional reduce el estrés vivido por la persona.
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Síntomas
¿Cuáles son? Cuando la persona fóbica se enfrenta al objeto o la situación que teme, puede tener algunos de los siguientes signos clínicos. En primer lugar, el individuo puede empezar a hiperventilar, es decir que su respiración se acelere. También el corazón suele aumentar su ritmo. Asimismo, puede tener sensaciones de calor con sudor excesivo y sufrir de mareos, molestias gastrointestinales o sueño. Por lo tanto, es importante intentar reducir las fobias para mejorar la calidad de vida del paciente.
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