El correcto desarrollo de los pies del niño, dependerá de la elección idónea de una zapatilla según la edad, además de permitirle satisfacer las diferentes necesidades de cada etapa de crecimiento del pie de los infantes. Para ello la reconocida marca de zapatos Bubble Gummers, en Santa Cruz, nos brinda el siguiente sistema de clasificación.
Entre 0 y 1 año. En esta primera fase de crecimiento del bebé, las zapatillas ( no zapato) cumplen cualidades como mantener la temperatura y protección al roce. Además, debe tener un diseño anatómico, liviano y de gran flexibilidad.
Cuando empieza a caminar. Al haber cumplido un año, el niño usará su primer par de zapatos. El calzado debe tener horma formadora y amplia para permitir una libertad de movimiento correcto y una completa articulación de los dedos. Parte delantera flexible, puntera reforzada, pero no rígida para proteger el pie de los golpes y tropiezos al caminar. Se recomienda también que tenga planta antideslizante y cuellos acolchados.
Cuando empieza a caminar. En esta fase ( 4 a 7 años) es necesario que el niño utilice un zapato más estructurado, que le ayude a adquirir equilibrio y le otorgue mayor seguridad en las actividades propias de su edad. Las características de los productos de esta fase son las mismas de la anterior, adicionando la posibilidad de incorporar plantas un poco más robustas, sin perder las propiedades de flexibilidad y seguridad. El zapato debe evitar lesiones, ya que en esta etapa el pie tiene mucha actividad.
Etapa junior. En esta fase (7 a 14 años) sin abandonar las características anatómicas y de calidad, es prioritario el diseño, la moda y la resistencia a las exigencias propias de la edad.
Más consejos. No debe molestar al usarlo, aunque sea nuevo. Tampoco se deben usar un calzado abotinado, porque no permite la movilidad del tobillo. La suela debe ser suficientemente flexible para permitir el movimiento de las articulaciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario