jueves, 22 de mayo de 2014

Temores de madres primerizas

Cuando nacen, son miles los sentimientos que abruman, felicidad, alegría, amor, ternura y también un gran miedo. Un miedo o temor de no saber que depara el futuro, miedo de pensar que algo le pueda suceder, el saber la gran responsabilidad que se tiene, pues esa cosita tan pequeña solo depende de sus padres.

Cuando nace un hijo se prende algo nuevo cada día, suelen decir las que ya son madres, y tienen mucha razón. Lo más importante sin duda, es saber disfrutar la maternidad, sobre todo en esa etapa tan linda de sus primeros días, porque algún día ellos crecerán y volarán del nido. Evidentemente a pesar de tan maravillosa experiencia los miedos no faltan, según dicen los expertos y varios estudios, eso es completamente normal. Eso sí, debemos cuidar que no se transforme en un miedo irracional.

Un estudio publicado en la revista Metas de Enfermería, el 70% de las embarazadas le teme al momento del parto. De ellas, el 69,7% teme que su bebé sufra alguna lesión o muera durante el parto y el 56% tiene miedo a que nazca con alguna malformación. Se trata de un temor perfectamente comprensible que casi nunca tiene repercusiones mayores, pero hay veces que estos miedos se intensifican, entonces surge la tocofobia.

Se conoce que el 3% de las mujeres en todo el mundo padece tocofobia, un miedo irracional al embarazo o al parto. La simple mención de un embarazo les puede provocar un ataque de pánico y, por eso, suelen evitar el tema. En algunos casos el miedo es tan atroz que recurren al aborto, en otros casos, simplemente se limitan a pedir una cesárea para evitar el momento del parto.

Normalmente esta fobia ataca a las madres primerizas o a aquellas que han tenido una experiencia traumática en un embarazo anterior. En ocasiones el miedo es tan intenso que genera un rechazo hacia el bebé y todo lo relacionado con él.

Las consecuencias

El miedo nunca es un buen consejero. Además de preocuparte innecesariamente y generar un estado de ansiedad que incluso puede llegar a afectar al bebé, también se ha demostrado que las mujeres que llegan a las salas de parto con miedo suelen tener alumbramientos más largos y laboriosos. El estudio, publicado en la International Journal of Obstetrics & Gynaecology, analizó a más de 2.000 mujeres y notó que el parto de las que tenían más miedo se demoraba 1 hora y 30 minutos más.

Por tanto, si tienes miedos, inquietudes o dudas sobre el embarazo, el parto y/o la educación del bebé, nada mejor que acudir a especialistas, quienes te dirán objetivamente si todo está en orden.

Instinto

Lamentablemente, el embarazo no viene con “manual de instrucciones”. Apenas te enteras de la noticia, las dudas y los miedos se arremolinan en tu mente. Pero recuerda esto, la maternidad es parte de la vida, si tu cuerpo es capaz de albergar la creación de un ser humano, descuida, el instinto te ayudará a cuidarlo, protegerlo y ayudarlo a crecer. Uno de los principales miedos al saber de un embarazo es el de perder al bebé. Esto es improbable que suceda. Menos del 20% de los embarazos se interrumpe por un aborto espontáneo y de estos, la mayoría sucede en las primeras semanas, antes incluso de que te enteres que estás embarazada según afirma al sitio Parents.com la Dra. Karyn Morse, obstetra y ginecóloga del centro médico Cedars-Sinai de Los Ángeles. Una vez que el obstetra escucha el latido del bebé –a las 6 semanas, aproximadamente–, el riesgo de que lo pierdas se reduce a un 5%.
Químicos en el embarazo

Pensar que el tinte de cabello pueda dañar al bebé, suena a creencia popular, sin embargo hay algo de cierto en esta preocupación. Los químicos de las tinturas pueden ser absorbidos por el cuero cabelludo y pasar, luego, al feto. Algunas instituciones, como el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, recomiendan a las mujeres embarazadas evitar los tratamientos químicos para el cabello durante el primer trimestre. A partir de entonces, puedes teñirte siguiendo algunas medidas de seguridad: opta por los reflejos localizados en lugar de productos para todo el cabello, usa guantes si te retocarás el color tú misma y hazlo en un ambiente ventilado.
Defectos congénitos

Como toda mamá embarazada, te cuesta no temblar ante cada control obstétrico. Miras expectante el monitor, con pánico de que te digan que algo va mal. La realidad es que la posibilidad de que tu bebé tenga un defecto congénito es del 4%, que incluye desde condiciones graves como Síndrome de Down, hasta detalles menores, como un dedo torcido o un soplo cardíaco que puede resolverse ni bien nazca, asegura la Dra. Morse. Para reducir la ansiedad (y el riesgo) de que algo suceda, recuerda tomar siempre tus vitaminas y el ácido fólico.

UNA VEZ QUE NACE...

TEMOR 1
Que el bebé te agobie y no seas capaz de saber por qué llora.

TEMOR 2
Que te angusties pensando que no tendrás suficiente leche para amamantar a tu bebé.

TEMOR 3
Que cuando prepares el biberón no sepas medir bien si la leche está demasiado caliente o que sea imposible esterilizar todo lo que se lleva a la boca

TEMOR 4
Que lastimes al bebé cuando lo bañes. Es tan pequeñito que da miedo meterlo al agua.

TEMOR 5
Que envolver a tu bebé como tamal le genere claustrofobia de por vida o le haga daño de alguna forma.

TEMOR 6
Que esté estreñido o que todo lo que coma lo vomite porque tiene reflujo.

TEMOR 7
Que cada vez que lo vas a ver está dormido boca abajo, aunque el pediatra dijo que debe dormir boca arriba o que no esté respirando.

TEMOR 8
Que se caiga de la cuna, que se resbale de tus brazos o que se golpee la cabeza.

TEMOR 9
Que se ponga triste porque lo sacas de tu cuarto para pasarlo al suyo.

TEMOR 10
Que no sea capaz de sentarse aún o que no gatee, hable o camine tan rápido como el resto de los bebés.



QUICKIE

Dar de mamar es la mejor manera de alimentar a nuestro bebé. Las mamás se tienen que formar antes, porque los bebés nacen sabiendo mamar pero las madres tienen que aprenderlo.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario