Ser guía. Cuando están cruzando esta etapa buscan una guía o modelo a seguir, ya sea que no lo encuentren en los padres, estos lo buscan en otras personas y es ahí que siguen modelos que los llevan por buen o mal camino, por eso es importante que un padre sea un modelo de comportamiento que le gustaría ver en su hijo, si quiere que sea honesto y abierto usted también tiene que ser así.
Saber escuchar. Es importante dedicarle tiempo, lo escuche y se interese por él o ella. Su hijo o hija sabrá que lo quiere si tiene conocimiento de lo que le pasa.
Haga preguntas. ¿Cómo pasaste el día? ¿Cómo te sientes? ¿Aprendiste algo interesante hoy? ¿Has conocido a alguna persona? Con hacer preguntas y escuchar atentamente usted puede mantener las líneas de comunicación abiertas con su hijo y le demostrará que usted de veras tiene un interés en su vida. "Esto hace que los adolescentes entren en confianza con sus padres y cuenten sus problemas", señaló Ledezma.
No tratarlo como a un niño. A pesar de que a veces el comportamiento de los adolescentes fluctúa entre la niñez y la madurez, no debe tratar a su hijo como a un niño, debe exigirle una mayor responsabilidad y madurez. Llegar a tratarlo como un niño causará que el adolescente se aleje de la familia, ya que se considera persona responsable.
No ser demasiado crítico. Criticar todas las cosas enfocadas en lo negativo no es bueno. Acuérdese que todos cometen errores y es mejor enfocar en enseñarle a su hijo a aceptar los errores como una experiencia de la vida.
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