Siempre vigilando. "Pero si se trata de brindar ese espacio al preadolescente, es necesario que siempre se haga monitoreando la actividad, siempre y cuando no se haga de manera invasiva, sino más bien disimuladamente y dentro de los parámetros de la negociación", indicó Flores.
Conozca a los amigos. Por su parte, Isabel Villagómez aconsejó a los padres conocer a los amigos de su hijo o hija. "Siempre es bueno y necesario saber nombre y apellidos, teléfonos y direcciones", precisó.
Vigile, pero disimuladamente. Al mismo tiempo, Flores recomienda brindar opciones de diversión al hijo, donde a su vez le brinde la oportunidad de elegir, lo cual genera en el preadolescente una sensación de independencia y también hace que pueda controlar la actividad. Flores propuso una lista de actividades que los progenitores pueden promover:
Deportes. Los deportes son una excelente opción. Fútbol, básquet, raquet, natación, paseos en bicicleta, etc., generan un desgaste energético que produce cierta sensación de gusto en el preadolescente, aparte que es bueno para su salud.
Espacios de lectura. Por si pensaba que leer libros es aburrido, quítese esta idea de la cabeza. Genere espacios en donde los chicos puedan reunirse y leer un buen libro. Averigüe cuáles son los libros que están de moda y convenza a su hijo de traer a sus amigos para que pasen una reunión diferente.
Tecnología. Estamos en el "boom" de la tecnología, así que es muy difícil ignorar este aspecto y una de las opciones en cuanto a diversión es el uso de computadoras o tablets conectadas a internet. Es bueno dejarlos utilizar, pero siempre controlando su uso.
Salir al cine. Dejarlo ir con sus amigos a ver una película es una de las opciones preferidas de los preadolescentes. Llevarlos y recogerlos en horario acordado entre padres e hijo es un aspecto fundamental. Además, no olvide que tiene que saber con qué amigos está saliendo.
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