Cuidado con los castigos

El castigo es un tema que no agrada a los hijos ni a los mayores, sin embargo, todo padre sabe que no debe permitir determinados comportamientos, pero existen formas de castigar que traen consecuencias nada agradables para el adolescente. Conoce las razones de por qué no debes castigarlos en público.

Avergüenza. La psicóloga Ximena Soto indicó que una de las principales razones es que los hijos quedan avergonzados y esto lastima su autoestima, es decir, ellos se sienten heridos y poco apreciados. "Cuando se los castiga, se debe especificar por qué situación, para no confundirlos". La psicopedagoga Nadia Rocabado apuntó que "los hijos avergonzados pueden generar un tipo de rencor hacia sus padres".

Rebeldía. Soto señaló que "al avergonzar al adolescente lo único que va a lograr es aumentar su grado de rebeldía, porque va a perder el respeto a su padre, porque él no lo respetó públicamente".

Temeroso - agresivo. Si el adolescente tímido es criticado constantemente en público, se vuelve temeroso, "en cambio los que son agresivos pueden llegar a contestarle a sus padres", mencionó la especialista.

Intimidad. Rocabado sostuvo que los progenitores deben respetar la intimidad del muchacho, "no se debe exponer los errores del hijo, si lo castiga en público lo humilla y no le indica que lo que está haciendo está mal". Además acotó que el adolescente va a evitar salir con los padres.

¿Qué hacer? Si papá y mamá saben que castigar a sus hijos en público los daña, lo que tienen que hacer es llamarle la atención en privado, señalándole qué parte de lo que ha hecho está mal y dándole alternativas de solución. Asimismo, agregó que los progenitores pueden dejar que pase el momento y esperar a volver a casa para decirle "mira esto pasó y ésto esta mal". Rocabado puntualizó que si están en un lugar público deben abandonar el lugar para corregirlo, porque si lo castiga en público, lo que va a conseguir es que las otras personas se metan y den sus puntos de vista.