¿Cómo lograr la convivencia entre hermanastros?

Hacer que un adolescente conviva con su familia es difíci, ahora imagínese cómo lo hará con nuevos integrantes. Los padres separados tienen derecho a rehacer su vida, aunque esto implique la convivencia con los hijos de la otra pareja. Es por ello que, la psicóloga, Lilian Castro explicó que los hijos de ambos, vienen de diferentes cunas y con diferentes pensamientos, lo que hace difícil consolidar el hogar, pero no imposible.

Lo que se debe evitar. Para llevar una vida placentera, se debe optar por vivir en una tercera casa. "Es decir, este debe ser un hogar nuevo, donde los adolescentes se acostumbren a la nueva familia", explicó Castro. De igual manera, aconsejó, que se debe evitar, obligar a los adolescentes a que se "quieran" o se conviertan en hermanos. "Es preferible que se vayan relacionando progresivamente y sobre todo respeten sus sentimientos y opiniones", aseveró la especialista.

Tiempo de adaptación a la nueva familia. La adaptación a la nueva familia puede llevar uno o dos años, todo dependerá de la convivencia entre familias. Por tanto, es importante darles tiempo para que acepten a la nueva pareja o asuman la nueva situación. Cabe resaltar que es importante dejar que el adolescente manifieste sus celos y rabia en lugar de que trate de negarlos. La relación de confianza con el progenitor es imprescindible para que la nueva casa, sea un verdadero hogar y no un campo de batalla.

Problemas comunes. Castro explicó que no será extraño escuchar lamentos , quejas o malos tratos del otro hijo, ya que, los jóvenes que conviven con sus padres y la nueva pareja, suelen poner de manifiesto esta situación familiar, sobre todo en momentos de desacuerdo y desenfado. Sin embargo, no trate de subestimar estas quejas, porque los chicos en ese momento se sienten emocionalmente heridos y necesitan que alguien los escuche. Además, que si atiende sus demandas, percibirá que tiene un lugar específico en el nuevo esquema familiar.

Paciencia y compresión. De su lado, la psicóloga Carola Romero destacó que si bien los adultos decidieron rehacer su vida encontrando una nueva pareja, debe tomarse en cuenta que los adolescentes son personas frágiles y esto implica un cambio importante, que no siempre es fácil de asumir, por lo que se necesita mucha paciencia y compresión para sobrellevar la situación.